Existen dos teorías sobre el origen de esta palabra; una es maya y la otra francesa.
Lamentablemente, en México, las cosas que son ilícitas no son llamadas por su nombre, por ejemplo, a los vehículos usados que llegan a territorio mexicano de manera irregular de Estados Unidos, se les apoda “autos chocolate” en vez de decirles como lo que son: autos ilegales.
Otro caso es el del combustible que es extraído de los ductos de Pemex para después ser vendida en el mercado negro. Aquí en vez de decir gasolina gasolina robada se le denominada como gasolina de huachicol.
Incluso existe una derivación que es “huachicolero”, misma que aplica para referirse a las personas que se dedican al robo y/o comercialización del combustible que es extraído ilegalmente en algunos de los ductos que existen en el territorio mexicano.
¿Cuál es el origen del huachicol?
Se entiende que se busca evadir la palabra robada a esta gasolina, pero, ¿por qué se le denomina huachicol o no con otro término? Pues bien, “huachicol” se deriva de la palabra “huache”, que proviene de forastero o ladrón y que en maya se dice “huach” o “waach”.
Con el paso de los años esta palabra se deformó al ser agregado el sufijo “col” que significa actividad ilegal. Así es como surge la palabra huachicol en referencia a la venta de productos de una forma clandestina.
¿Qué dice la otra teoría?
También existe la teoría que indica que la palabra “huachicol” proviene del latín “aquati” que significa “aguado”. Al emplearse en el francés, se transformó en “gouache” haciendo referencia a una técnica de pintura del XVI, que consistía en diluir las pinturas. Y más adelante, al llegar el nombre de esta técnica a México durante el siglo XIX solía referirse a él como “pintar a la guach”.
En cualquiera de las dos teorías, tanto maya “huach” o la francesa, “gouache” fue utilizada para hacer referencia a las bebidas alcohólicas clandestinas a base de alcohol de caña que se vendían ilegalmente en México a fines del Siglo XIX y principios del XX.
Posteriormente, el huachicol también se tomó para denominar a la gasolina robada de los ductos y que por lo regular es adulterada para hacer rendir más cada litro sustraído. De hecho, se hizo más popular, pues al escuchar o leer esta palabra lo primero que viene a la mente es combustible más una bebida adulterada.
¿Es un sinónimo de gasolina robada?
Lamentablemente, el hecho que el huachicol sea todo un sinónimo de gasolina robada se debe a que en los últimos años aumentó de manera significativa su robo, teniendo importantes consecuencias económicas, sociales y ambientales.
Con todo y que las autoridades mexicanas han implementado medidas para combatir esta actividad ilícita, que incluyen el despliegue de fuerzas de seguridad, el cierre de ductos, la vigilancia y el fortalecimiento de la infraestructura de Pemex para prevenir los robos, esta actividad sigue siendo constante.
Incluso se puede decir que el robo de combustible ha generado una industria ilegal altamente lucrativa, estimada en miles de millones de dólares al año. Lo anterior se debe a que los huachicoleros aprovechan las vulnerabilidades de la infraestructura de Pemex, como la falta de seguridad en los ductos y la corrupción de algunos empleados, para extraer grandes cantidades de gasolina y diésel día a día, que luego son vendidas en el mercado negro a precios más bajos, además que son rebajadas para aumentar las ganancias.
¿Cómo afecta la gasolina de huachicol?
También se puede decir que el impacto del huachicoleo en México es multifacético. En primer lugar, representa una pérdida económica significativa para Pemex y el Estado mexicano, ya que se estima que miles de millones de litros de combustible son robados cada año. Además, el mercado negro de la gasolina huachicol compite de manera desleal con las estaciones de servicio legales, lo que afecta negativamente a los negocios legítimos y reduce los ingresos fiscales.
En términos de seguridad, el huachicoleo también tiene consecuencias graves, ya que las bandas criminales involucradas en esta actividad suelen estar armadas y no dudan en utilizar la violencia para proteger sus intereses. De esta forma, los enfrentamientos entre los huachicoleros y las fuerzas de seguridad han sido frecuentes, causando lesiones y muertes tanto de los delincuentes como de los agentes encargados de hacer cumplir la ley.
Asimismo, la extracción ilegal de combustible puede provocar explosiones y derrames de hidrocarburos, poniendo en riesgo la vida de las personas y causando daños ambientales significativos. Esto se debe a que los huachicoleros improvisan conexiones ilegales a los ductos de Pemex, lo que aumenta el riesgo de fugas y explosiones que afectan tanto a áreas rurales como urbanas.
Tanto por la complejidad de la red de ductos, que es enorme, como por la corrupción, erradicar por completo el robo de gasolina es un desafío complejo que requiere de la cooperación entre las autoridades, la sociedad civil y el sector empresarial.